¿Qué es la innovación?
Es definida por la Real Academia Española como la “Creación o modificación de un producto, y su introducción en un mercado”.
He querido comenzar con esta definición porque en los últimos días es quizás la palabra que más se ha utilizado desde el evento de Samsung en el cual presentó sus nuevos Galaxy S10, pero sobre todo el Galaxy Fold. Esta misma palabra también ha sido utilizada para restregarle en la cara a Apple que ya no es una empresa innovadora, que se le acabaron las ideas, que ahora Samsung es el innovador, que Apple lleva años sin innovar y muchas otras cosas.
Sin embargo, sinos ceñimos a la definición de innovación, Apple ha innovado desde sus inicios, desde el iPhone, desde el iPad, desde el Apple Watch, desde el Touch ID y más recientemente Face ID. Debido a que si bien, no ha invitado el hilo negro (como muchos otros fabricantes tampoco), no solo ha modificado un producto y lo ha introducido al mercado, ha mejorado y reimaginado productos que se han convertido en un referente en su industria.
Pero bueno, dijimos que hablaríamos del futuro.
Futuro simple.- “Tiempo absoluto que expresa que algo existirá o tendrá lugar en un momento posterior al momento del habla” RAE.
Sin lugar a dudas Samsung y ahora también Huawei, nos han traído un dispositivo del futuro, pero del futuro, no del presente. ¿A qué me refiero con esto?, que si bien es un dispositivo futurista, algo no concebido antes, no se ve como un equipo que pueda ser acogido por el mercado actual y sobre todo sostenerse.
Hasta al momento poco se ha escrito al respecto del Fold (más allá de su ficha técnica y precio), pues ni los asistentes al evento han podido probarlo, lo más que se ha visto de él son los lags durante la presentación de Samsung, dando la sensación de estar ante un concepto más que ante un móvil híbrido funcional.
Pero bueno, no podemos culpar a Samsung por ello. Lo mismo hacen los fabricantes de automóviles, cada año en los auto show muestran sus concept cars, automóviles futuristas que aun no están listos para introducirse al mercado, ya que la tecnología empleada aun no esta lo suficientemente madura o accesible, además que su precio seria únicamente para los más adinerados, pero deja claro lo que es capaz la tecnología que en un futuro veremos como algo cotidiano.
Y ante los ojos críticos y objetivos de muchos, eso es lo que ha hecho Samsung precisamente. Han mostrado lo que son capaces de hacer con la tecnología OLED o en este caso AMOLED, sin embargo, no muestra estar lo suficientemente maduro y funcional, y mucho menos asequible para un mercado masivo, solo para uno muy selecto y que muy probablemente lo adquiera solo porque tiene la capacidad de hacerlo, ya que su precio es de $1,980 dólares, que al tipo de cambio al momento de escribir este post, serian $37,893 pesos mexicanos, sin embargo, si el equipo llega a nuestro país, muy probablemente ese no será su precio, pues no debemos olvidar que en nuestro país siempre hay que sumarle algunos impuestos, por lo que podría llegar a tocar los $40,000 pesos mexicanos, precio nada atractivo para la gran mayoría.
¿Y por qué hablé de innovación y Apple al principio?
Porque la innovación no solo va de la mano con el futuro, sino también con el presente. Si bien no deja de sorprender de lo que es capaz la tecnología, no siempre esta preparada para nuestro presente, las pantallas curvas se presentaron hace años en los televisores de Samsung, después se llevaron al móvil y no cuajaron. Las pantallas flexibles fueron igualmente presentadas hace algunos años, no solo por Samsung sino también por LG, ya era momento que alguien trajera un concepto de móvil plegable, sin embargo, Samsung ha ido más allá y lo ha presentado en público y con fecha estimada de lanzamiento, no lo culpamos, tal vez quizo ser el primero, y merece su mérito al igual que Huawei.

Pero falta ver que su innovación se mantenga a flote por ser de ellos, y no tenga que venir Apple y presentar un dispositivo plegable reimaginado o “mejorado” y sea éste el que se introduzca al mercado de forma sólida y se convierta en un referente, porque en palabras de José Alfredo Jimenez “…no hay que llegar primero, pero hay que saber llegar”.